martes, 29 de mayo de 2007

Lo que de verdad importa

¿Por qué la gente se toma la vida tan en serio? ¿Por qué se le da tanta importancia a las cosas que no la tienen y se le resta a las que sí? La mayoría de las personas todavía no han asumido que su tiempo es demasiado importante como para perderlo con cosas que no lo merecen. Asumir un trabajo, adquirir responsabilidades... son cosas que sólo debemos hacer para garantizarnos la calidad de nuestro tiempo de ocio. Aprendamos de una vez que debemos trabajar para vivir, y no vivir para trabajar.

Socialmente se desacredita el tiempo de ocio porque va ligado a una imagen de desecho de responsabilidades. Es un tiempo en el que se busca la felicidad personal, el placer por el placer. Y se ha creado una falsa conciencia social de que eso es malo. ¡Obscenidad!¡Libertinaje! La imagen de la persona modelo a seguir es la que busca la autosuperación en su trabajo, la realización personal. Pero es que la realización personal poco tiene que ver con el compromiso de responsabilidades. Debemos entender de una vez que la única razón por la que encontrar un trabajo es importante, es porque estamos asegurándonos una calidad de vida. Y el único tiempo realmente importante es el que dedicamos para nosotros y los nuestros. El resto debemos sacrificarlo para poder seguir gozando de la misma calidad del primero. Y es el sitio donde entra Don Dinero. No os dejéis seducir, tener más dinero no necesariamente repercute en una mayor calidad de vida. De nada sirve amasar cantidantes ingentes de pasta cuando quizá el tiempo libre que sacrificamos tenía un valor mucho mayor. Hay que tasar inteligentemente.

Mi consejo: buscad un trabajo que os guste (que sea un tiempo a sacrificar no implica que deba ser desagradable) y que os permita disfrutar de vuestro tiempo de ocio inteligentemente. Permitir que el trabajo ocupe la mayor parte de nuestro tiempo puede parecer una alternativa fácil para cuando queremos mantenernos ocupados y ausentarnos de la realidad porque quizá no es tan amable como quisiéramos. Sin embargo esto a la larga se volverá en nuestra contra. El trabajo no nos construirá una realidad mejor. Deberemos enfrentarnos igualmente a ella, y a la larga caeremos en la melancolía y desmoralización. Por eso nuestra principal responsabilidad es alcanzar nuestro bienestar. Ser felices. Ninguna otra responsabilidad debe imponerse a ésta. El resto no es más que el camino a seguir, y no la meta.

1 comentario:

Anónimo dijo...

"... tener más dinero no necesariamente repercute en una mayor calidad de vida."

¡¡No huevos!! xDDDDDDDDD

Ya quisiera verte con familia e hijos. Y cuando se echen novia... buf... jajaja. ¡Y la hipoteca! x_x

Referencia a una solución:
"Yo no voy a tener hijos, porque son una boca más que alimentar" - Kike, emprendedor.